sábado, 15 de noviembre de 2008

a veces un jardín secretamente vivo:

la intensísima vida de lo más diminuto
el arduo transitar de las lombrices
las osamentas de hoja,
arañitas tan finas que no existen
y valles, ramas, hondas marcas de lluvia
arena y tierra, cosas que se pudren
para volverse nuevas.

así sin pretensiones
así como un jardín secretamente vivo.

1 comentario:

Teodoradorna dijo...

las hormigas siempre me infundieron algo de magia, mas de una vez crei que eran hojas en procesion o de un exodo porque ya se habian hartado del viento.
las magicas eran las hormigas que iban dobladas por su peso.
un abrazo grande