miércoles, 17 de diciembre de 2008

un dolor en los pies
una ansiedad de andar
un impulso, una carencia
que se cura viajando.
fuerza centrífuga concéntrica en sí misma.
lo que no ví me empuja
irremediablemente
hacia adelante
lo que nunca toqué me arde en las manos
olor de las mañanas que aún no desperté
y cielos transformando el tornasol
de una tarde perdida en los maizales.

hay más vientos que puntos cardinales:
tal posibilidad
me vuelve transitorio
no concibo raíces más que estacionarias
el todo es demasiado y yo soy poco
para la maravilla.

1 comentario:

Teodoradorna dijo...

hay mas vientos que puntos cardinales. y eso debe ser lo mas cierto que he leido en estos días largos donde el viento alterna con su ausencia y uno no sabe donde ir.
es muy lindo.
un abrazo